Los hackers han publicado estas identificaciones junto a los usuarios a los que corresponden y sus tokens de APNS. No obstante, no se ha dado luz a información personal de usuarios.
Este ataque no ha sido contra Apple, sino contra el FBI. Obtuvieron unos 12 millones de identificadores pero sólo han hecho públicos 1.000.001. Igualmente, Anonymous tuvo la «buena voluntad» de no publicar todos los datos a los que tuvo acceso, incluidos los personales y de localización, puesto que su interés era el de generar ruido y preocupar a los usuarios de Apple, derivando sus temores hacia la agencia gubernamental norteamericana.
La motivación del acto de robo y publicación de identificadores y usuarios no era otro que la constante queja política de Anonymous contra las acciones del gobierno de EE.UU.